Con la llegada del invierno, el gasto en calefacción de gas natural se convierte en uno de los mayores quebraderos de cabeza para hogares y empresas. Una tarifa mal elegida puede suponer facturas que se disparan en los meses fríos.
Por suerte, existen tarifas de gas diseñadas para calefacción que permiten ahorrar hasta un 30% anual.
¿Qué factores influyen en tu factura de gas?
Término fijo → lo pagas todos los meses aunque no consumas.
Término variable → el coste de cada kWh de gas consumido.
Tipo de tarifa → regulada (TUR) o libre.
Tipos de tarifas de gas
1. Tarifa TUR (Último Recurso)
Precio regulado por el Gobierno.
Suele ser la más barata para consumos domésticos.
Se actualiza cada 3 meses.
2. Tarifas fijas del mercado libre
Pagas un precio estable por kWh todo el año.
Recomendadas si quieres seguridad y evitar subidas.
3. Tarifas indexadas
El precio sigue la evolución del mercado mayorista.
Rentables cuando el mercado baja, pero inestables.
Ejemplo de ahorro real
Una familia con calefacción a gas consume unos 9.000 kWh al año.
Con una tarifa cara (0,12 €/kWh) → factura anual de 1.080 €.
Con una TUR (0,08 €/kWh) → factura anual de 720 €.
👉 ¡Ahorro de 360 € al año solo por cambiar de tarifa!
Consejos para gastar menos en calefacción
Mantén el termostato entre 20º y 21ºC.
Purga los radiadores antes de cada temporada.
Revisa el aislamiento de ventanas y puertas.
Haz una revisión anual de la caldera para mejorar la eficiencia.
FAQ
1. ¿Puedo cambiar de tarifa de gas en invierno?
Sí, puedes cambiar en cualquier momento.
2. ¿Qué tarifa conviene más para familias?
En la mayoría de casos, la TUR es la más barata.
3. ¿Cuánto tarda en hacerse efectivo el cambio?
Entre 15 y 20 días, lo que dura un ciclo de facturación.
Conclusión
La tarifa de gas correcta puede ahorrarte cientos de euros cada invierno. Antes de que llegue el frío, revisa tu contrato y busca la opción más económica para calefacción.
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